Llevaba meses preparandose. Ensayando jugadas. Haciendo miles y miles de partidas para poder levantar la que de verdad importa. Eso si, sin avaricia, como habían ensayado con su mentor, apostando sólo en las manos que realmente tenía buenas cartas. "Los faroles sólo los cuelan los malos apostadores, y tú no vas a ser una de ellos".
Miaka Lu estaba absorta mirando sus cartas cuando el crupier le llamó a apostar o pasar con un inicio de tos.
Estaba bastante indecisa pues sus cartas no la convencian a seguir adelante. Intuía que el tejano se había marcado un farol, pues había vuelto a hacer su guiño de perdedor: mirar a cada jugador a los ojos.
El hindú aún no había levantado sus cartas, llevaba así toda la partida, levantándolas en el último momento, para que nadie pudiera ver su reacción, cosa que de momento ni la beneficiaba ni la perjudicaba, pues tenía más o menos el mismo montón de fichas que en el inicio de la partida.
Lo cierto es que se apiadaba de Tony, el anciano de Detroit, pues seguía el plan de su ONG y compartía sus bases. Si ganaba bastante dinero, seguramente le haría una generosa donación.
Mirando otra vez de reojo a su trio de ases, poníendo sus esperanzas en esas cartas y en la mala suerte de los demás. Y jugo esa mano igualando la apuesta perdedora del tejano.
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2 comentarios:
Hola a todos, os escribo porque si alguien tiene interés en saber sobre historias, anécdotas y opiniones sobre la vida en un Casino, os invito a visitarme en DEADLER que es un portal de CROUPIERS.
Aunque también os invito a mi rincón en El Blog de Murray aunque todavía tengo pocos contenidos.
Pues lo dicho, estáis invitados.
Un saludo.
Murray the DEADLER
No creo que sea mucho pedir que si se quiere hacer publicidad, al menos que no sea tan descarado y se haga alguna referencia al post...
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